Porque una amatxu es capaz de saber lo que nos pasa con sólo mirarnos, por tantos desvelos, por lo rico de sus tuppers, por tantos mimos cuando estamos malitos, por esos zumos que te bebíamos rápido antes de que se fuesen las vitaminas, por tantas llamadas por teléfono, porque aunque nos riña, sabemos que lo haces con cariño, por tanta comida rica, por tantos pórtate bien y a ver lo qué haces, por los besos y los abrazos, por cuidarnos aunque nos escueza, por hacernos reír y jugar con nosotros… por tanto, ¡Feliz día, Amatxu!
4 de Mayo, Día de la Madre
Lautada Bizirik ACICSA 
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